El lijado o pulido de un parquet de madera

Antes de comenzar el pulido de un suelo de madera hay que realizar unas tareas previas, si es una restauración de suelo viejo (rehabilitación) se deven retirar totalmente los muebles, cuadros, alfombras y cortinas de toda la superficie.

Antes del pulido se deberán realizar otros trabajos de industriales como son los de peletería, pintar, empapelar y las operaciones de reparar el propio parquet, comprobando si existen tablillas sueltas o defectuosas, pegandolas o cambiandolas si es necesario.

Si vamos a sustituir los zocalos y rodapies se deben desmontar con cuidado, si no se van a cambiar es mejor protegerlos con papel o cinta adhesiva para evitar que se dañen durante el lijado o se manchen durante el masillado o barnizado.

El suelo debe estar limpio y hay que prestar atención a los posibles clavos que están en la superficie en el caso de las tarimas clavadas, ya que pueden dañar la lija e incluso los rodillos de las maquinas pulidora.

 

El desbastado del parquet

El desbastado es la primera pasada que se realiza a toda la superficie, igualando posibles irregularidades entre tablillas y eliminando el antiguo barniz. Cuando se trata de un suelo de nueva instalación son necesarias varias pasadas para igualar toda las superficie, pasándolas cruzadas alternativamente y no en el mismo sentido, pasando la última en sentido paralelo a la fibra de la madera. Este proceso se realiza con una lija más o menos gruesa en función del tipo de lijado y la madera, y el grano de la lija puede variar también si es una instalación nueva o restauración de parquet (ver tabla más abajo). El desbastado es el paso de todo el proceso en que se lija más grueso total de madera, por lo que es conveniente hacerlo bien.

 

Lijados intermedios

Estos lijados son los que menos grueso quita a la madera, apenas unas décimas de milímetro. Se emplean lijas de grano medio-fino en función de la madera y el número de pasadas necesarias. Si se tienen que dar más de una se recomienda girar la pulidora 180 º para evitar irregularidades. Y es en este paso es en el que se masilla toda la superficie de parquet.

 

Afinado para barnizar

Es el último pulido antes de barnizar. En esta pasada se deja la superficie preparada para el barnizado y se eliminan los sobrantes de masilla una vez seca. Se realiza con lija de grano fino, y puede requerir una segunda pasada con grano extra fino o repasar con lijadoras de disco posibles fallos.

Todos estos pasos y el proceso completo de restauración debe hacerlo un profesional con experiencia en el manejo de la maquinaria, sin prisas porque cada paso requiere su tiempo y así lograr unos óptimos resultados finales.

 

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